27 agosto, 2006

closed

Vamos a cerrar las persianas por esta noche, aislar el tiempo en un compartimento estanco de una puta vez, sólo para mi.. Vamos a recortar la isla perdida donde no te pueden encontrar con tus diez bártulos elegidos todos dentro de ésta habitación.. el dulce, los papeles, los tragos.. los tabiques espaciales que ensanchan los segundos.. el único tabaco que se disfruta, los vegetales que piensan rápido, un silencio con flamenkito por primera vez después de mucho tiempo sin escuchar así.. una cerveza más pero distinta a todas.. una dispersión de las de dejarse llevar.. y ésta, esta última que hace el noveno bártulo, casa con la décima, que viene a ser, aunque no lo parezca, estar aquí.

La frenada es seca, y en vez de la goma en el asfalto tengo letras.. Después de tantos momentos que hinchan el globo de la empachada de agosto, he decidido tomar la penúltima en este campo verde, pegado al bar de la esquina, a un par de palmos de dónde un día había un after que abría de cuando en vez o de noche en noche.. he vuelto porque quería ver a unos amigos, enlaces con sus techoenfaltas y tiempo poco medido con el que aplicar ese de antes que era el noveno..

El closed abre el after, y suena una campana como de esas de dar propina o de cerrar pubs.. Supongo que si despresurizarme implica estar aquí, que si al recortar el naufragio dónde elijo reposar por fin mi posaderas me encuentras, querrá decir que funciona el cartelito, que el eco se olvida, como las paradas, y que mi puta boca deslenguada aún tiene forma de dedos, sin promesas, llenas de un sonajero por cada historia que pica mi curiosidad por saber cómo sería aquí, en este lado de la barra donde me creo un contacontos de bufonadas, dónde los segundos se pliegan con andamios y dónde brindo porque estés aquí.