Corto, Calamaro y yo.

Si ya lo decía Corto.. en esta vida la mesura se encuentra en relajar prioridades y todo, paseniño, acabara saliendo. Que hoy no sepa dónde están las tretas, el cometido, la retranca, los formalismos, el juicio o la inspiración, no quiere decir que me tanga que alarmar.. no tengo nada en la manga ni valgo para Tamariz o lotería para crear ilusiones, prefiero esperar tranquilo o buscar sin querer las posibilidades de una sonrisa. Lo escueto a veces se necesita y lo parco requiere de un silencio que aproxima el placer de disfrutar de esta cerveza y este cigarro.. a sorbos y caladas, a caladas y sorbos.. y suena Calamaro, desgarrando su voz, y arrancándome hoy la mía.. prendido a tu botella vacía, esa que antes, siempre tuvo gusto a nada..